miércoles, 17 de marzo de 2010

Otra vez en el hospital

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Odio los hospitales. Me molesta ir, reniego siempre por eso. Mi mamá se enoja y dice que soy igual a mi abuela. Pero hoy le di a mi papá unas cuantas razones para detestar ese lugar.

Hoy, mi día de descanso (no tengo que ir a la facultad), mi mamá decidió que tenía que ir a hacerme los estudios que me mandó la doctora. Ok, las órdenes vencían hoy y si no me los hacía tenía que pasar otra vez por el consultorio de la médica. Entonces, mal que me pese, fui. Me tenía que hacer análisis de sangre y de orina, radiografía de tórax y electrocardiograma. Me desperté a las 9 am y me fui. Llego y había 30 personas adelante mio, yo tenía el número 67 e iban por el 34. Genial. Al rato me di cuenta que me había olvidado el exámen de orina en casa, mi papá casi me mata. Pero bueno, le dije que era por control por el problemita que tuve a fines de enero, que no se preocupe. Y no me dijo nada. Me quedé esperando, mientras le daba a mi papá una charla de por qué nos mandan a sufrir sacándonos sangre (si, soy exagerada) y le dije que alguien tendría que inventar un dispositivo (tipo el que te toma la glucosa) para evitar que nos pinchen. Mi padre, acostumbrado a mis planteos boludos, se me reía. Y mientras tanto, yo rogaba que no llegue mi turno. Pero obviamente, llegó mi turno y tuve que dar la orden y bla bla bla. Tuve que esperar 15 minutos mas para pasar por los box (?), y mientras le planteé a mi padre: "es necesario que estan las botellas con pis en el mostrador? O sea, es un asco... Re anti-higiénico. Ves porqué odio los hospitales! Y mirá a ese viejo de ahí (como puedo, se lo señalo)... Hace falta que esté escarbando su nariz en la sala de espera? Por Dios, me saca!" Y mi papá se seguía riendo. Y me llaman. Una chica jovencita de no mas de 28 años me atiende y me dice: cerrá la mano. Ni bien me dice eso, miro para el lado contrario del brazo que iba a ser pinchado. En 1 minuto salí. Un trámite, claro. Ni me dolió. Siempre exagero.
Pero no terminaba ahí, fui para la parte donde hacen radiografías y tuve que esperar ootros 20 minutos (odio esperar!) y me tomaron la radiografía. Después seguía el electro, para el cual tuve que esperar 15 minutos y no me lo hicieron, porque la enfermera me dijo "hacételo el día que tengas el turno". O sea, por qué no me lo dijiste apenas me viste!? No ves que perdí el tiempo? Si, me saca. A todo esto, mi papá se tuvo que volver a mi casa para hacerle la comida a mi hermana. Me tuve que volver caminando bajo los rayos del sol, por un lugar no muy lindo. Pero llegué sana y salva.
No piso un hospital de acá a un mes si no es por algo totalmente urgente!

2 comentarios:

Nati Jota 18 de marzo de 2010, 22:07

Mama dice que las cosas que tenemos que hacer y no queremos, por más que sean muy, muy bobas, que las ofrezcamos como sacrificio. Que se yo, cosas locas de mamá pero me hace hacer las cosas con más gana.
Un besito y me alegro mucho que lo que escribí te haya llegado, de verdad.

Flor 19 de marzo de 2010, 1:27

pau un mes es poco tiempo!! yo me saque sangre la seman pasada y tengo que sacarme otra vez el lunes! te acordas la anemia? bueno no se mejora. sigue bajando!! me quiero matar! te quiero linda besoss!